La radioterapia de intensidad modulada permite realizar una escalada de dosis numerosas patologías como tumores de cabeza y cuello, cáncer de pulmón, tumores digestivos, cáncer ginecológico, cáncer de próstata, reduciendo, en algunos casos, el número de sesiones de forma significativa, respecto a los tratamientos convencionales.
Dada la complejidad asociada a estas modalidades de irradiación, en las que existen variaciones de dosis muy abruptas entre tumor y tejido sano, es necesario el uso de imagen guiada (IGRT) que garantice la correcta administración del tratamiento sobre la lesión.
Además, la
VMAT acorta de forma muy importante los tiempos de irradiación, contribuyendo a aumentar aún más la seguridad del tratamiento y mejorando el confort del paciente.